jueves, 8 de noviembre de 2007

CeNiT mItÓmAnO

/Cenit Mitónamo/

I

Mis sangres envuelven las tardes,
las callejuelas que esperan en escarnio…..
rompen las sombras en juncos de peces
que se ahogan a mi garganta,
en estas góticas celdas,

Aquí todos se ríen,
todos acurrucan su escollos
en bruces lamentos..
acacia sus labios,,,, solo balbucean el trinar
de un viernes
que despide un bostezo de sol.

Todos entumidos esperan…..
solo esperan
lenguas de sial.…….
de púrpuras tardes,
de carruseles ceniza que irisan
los túneles que surcan los aires.

Jadeantes de sobrias calles
de lunáticos zorros,
de rufianes que disipan alevosías
y solo esperan todos locos.. entumidos
por el

TRANSITO




II

Altares de bestias cuajadas
delirios de ribetes brebajes
de centellantes que custodian
el orgasmos /cenit mitónamo/

La /vida/ trenza diademas
la vida apura los verbos,
los búcaros centenos.

Y se abren agitando las zarzas
del espejo perpetuo
de la rancia tiniebla del espanto.
Maquillan espesos sueños...
/inquisición
nocturna/

Los rincones, los silencios
vestida de lluvia atavían el trafico.

Las sórdidas
miradas del viento.

Aquí todos absorben,
navegantes,
violines encadenados,
mares de cristal verde,
regazo de pérfidas manos,
trémulo del eco que bermeja lucido
al naufrago lirio del trueno.

…..Olas castañas de hebra…..
mis retinas en el excéntrico vagón
sin el tandeo del preso bastardo.



III

Cabalgan en sideral tamboril
mojado ,mueren /desfallecen/
amordaza los demonios ,,
la rabia imperceptible del haz de luz.

Mira la doblez
los curas jalando
el suicidio de la noche

Los vacíos que caen como lepra
la virtud de los fantasmas
de tuétanos desiertos

Allí cual sarcófago sudario,
las magras montañas
despierta los canes.

Aquí todos se ríen
todos en tajos caretas
/silencio de vientres/
que bailotean……
que carcomen las hojas sin sentidos.


Ubres urbanas de semáforos
enamorados..
rincones que petrifican
un preludio,,
que se yerguen
a los campos mediáticos
de cerúleos ribetes
de pisadas
de desierto
de zanjas en llamas,
de poemas que vinagran mis ojos.


Se autoflajelan
carcomen la hiel de cemento ,
mientras la niña prosa las calles
/al epitafio/

Se desgarran en sangre corren
ilusivos en el ciclón que
/la embiste/

IV

Huido del sol
enardecidos de dardos centellantes ,
graznidos , virilmente acerba la montaña
cohabitan con la ventana del paroxismo
escupen sin sol dentro
del túnel
del balsámico arrecife
que pululan la urbe.


Sin sentido sin ariete ,,
deslizándose

/atrios/ pedestales de ojos muertos ……